Salsa de caramelo con sal marina

Esta salsa de caramelo es perfecta para ponérsela a un helado, o a una torta, o a cualquier cosa que te provoque. El balance entre el dulce del caramelo, y el salado de la sal, la hacen tan deliciosa que vas a sentir la tentación de agarrar una cucharadita cada vez que pases en frente de la nevera. Un peligro total. 

Para hacer caramelo es recomendable usar una olla o sartén de fondo claro. El objetivo es obtener el color «caramelo», por lo que un fondo oscuro va a dificultar la visibilidad. Si no tienes nada con fondo claro, usa una paleta blanca para tortas a prueba de calor , o cualquier otro utensilio que tengas que te pueda ayudar a ver el color del caramelo.

Ten todos los ingredientes a la mano cuando la vayas  a hacer. Esta salsa es fácil de hacer, pero requiere de mucha atención, y unos segundos de más pueden hacer que se queme. Para evitar que eso suceda, ten todo listo y medido a la mano.

Siempre que hagas caramelo debes tener muchísimo cuidado de no quemarte. Las quemadas con caramelo son las peores. Te lo digo por experiencia. Por más que te provoque probar tu caramelo, espera a que se enfríe primero. 

Ingredientes: 1 taza de azúcar, 1/3 de taza de agua, 1/4 de taza de mantequilla (a temperatura ambiente), 1/2 taza de crema de leche (también a temperatura ambiente), 1 cucharada de sal Maldon, o 1/2 cucharada de sal marina.

Preparación: En un sartén a fuego medio-alto, derrite el azúcar con el agua, revolviendo constantemente. Cuando la mezcla comienza a hervir, deja de revolver y vigila el caramelo con mucha atención. Ahora es cuando vamos a buscar el color que deseamos obtener. Revuelve solo de vez en cuando. Primero, la  mezcla va a ser transparente y poco a poco va a cambiar a un color amarillo, luego anaranjado, y finalmente un tono ambar rojizo. Ese el color final. En esta etapa hay que agregar la mantequilla rapidamente para evitar que se queme el caramelo. Apenas agregues la mantequilla, revuelve constantemente la mezcla y apaga el fuego. Si tienes hornillas eléctricas, saca la olla o sartén de la hornilla. Agrega la crema de leche y revuelve la mezcla hasta que sea homogénea. Finalmente, agrega la sal. Mezcla bien y guarda en un recipiente esterilizado de vidrio. Cuando se haya enfriado, guardalo en la nevera.