Salsa Holandesa, una versión fácil y deliciosa!

La salsa holandesa es una maravilla! Va buenísimo con unos huevitos pochados para el desayuno. Es una delicia con espárragos, o un buen acompañante para un pescado a la plancha. Como quieras y cuando quieras, esta versátil salsa es una muy buena adición para tu repertorio de cocina.

La receta original se hace batiendo a mano. Toma mucho tiempo, y esfuerzo, y es muy delicada de preparar. Pero no te preocupes, esta no es la receta original. Se hace con licuadora, en menos de 5 minutos, y es muy difícil o casi imposible que se te corte si sigues bien las siguientes indicaciones. 

Ingredientes (para 2 o 3 personas):

• 110 gramos de mantequilla derretida (sin sal. Si quieres utilizar mantequilla con sal, no le coloques sal adicional)
• 2 yemas de huevo (asegúrate de que los huevos estén muy frescos siempre que vayas a usarlos en preparaciones crudas. Para saber si están frescos sumérgelos en un vaso con agua. Si se quedan reposando en el fondo del vaso significa que están frescos, si flotan, están viejos).
• 1 cucharada (de té) de vinagre blanco
• 1 cucharada (de té) de jugo de limón recién exprimido
• 1/2 cucharadita de sal.

Preparación: Mezcla en la licuadora las dos yemas de huevo durante un minuto. Agrega el vinagre y el limón, licua durante 10 segundos. Ahora, con la licuadora prendida, ve agregando muy poco a poco la mantequilla derretida. Debe caer en forma de hilo constante, súper delgadito. Esta parte no se debe apurar. Si se coloca muy rápido se corre el riesgo de que se corte la salsa. Cuando hayas agregado toda la mantequilla, prueba la salsa y corrige de sal en caso de ser necesario. Si quieres tu salsa un poco menos espesa, agrega una o dos cucharadas de agua destilada caliente o tibia, con la licuadora prendida. Sirve inmediatamente.