Esta sopa es de esos platos que te hacen sentir calentito por dentro, y no por su temperatura si no por lo cálido de sus sabores.
Pho es para los vietnamitas lo que para nosotros es el pabellón o la arepa. Hay muchos tipos de pho, y cada familia tiene su propia receta. La que vas a encontrar acá es una bastante sencilla, pero rica en sabor, frescura, texturas y aromas.
En esta preparación utilizo dos veces “sachets”. Pequeñas bolsitas de tela estilo muselina, donde se colocan ingredientes adentro, para que aporten sus aromas a la sopa, y que al momento de haber cumplido con su función, estos puedan ser removidos fácilmente para ser desechados. Hay bolsas que venden especialmente para eso, se llaman “soup socks” (medias o calcetines para sopas), pero realmente no es necesario tenerlas. Cuando se trata de ingredientes pequeños yo utilizo los gorritos que le ponen a los limones para que no salpique su jugo cuando son exprimidos y luego con una aguja e hilo, le coso los extremos para cerrarla. Si tienes una servilleta de tela que ya esté muy viejita, y limpia, la puedes utilizar también. Cualquier tela limpia sirve, usa tu creatividad.
Nota: Esta sopa es todavía mejor al día siguiente!
Ingredientes 1/2:
1 pollo entero, limpio y sin organos.
3 cucharadas de aceite de ajonjolí (se puede sustituir por aceite vegetal)
1 cebolla picada en cuadritos
2 zanahorias picadas en trozos
2 cucharadas de jengibre picado pequeñito
1 palito de canela
1 estrella de anís
6 clavitos de olor
10 granos de pimienta de negra
1 paquete de fideos de arroz
5 cucharadas de salsa de soya japonesa
2 cucharadas de fish sauce tailandés
1 cucharadita de sal
Ingredientes para servir (al gusto) 2/2:
Cilantro
Limón
Chile picante
Menta
Preparación:
En una olla con aceite de ajonjolí, sofríe la cebolla, el jengibre y la zanahoria hasta que estén traslúcidas.
Coloca el pollo y cubre con agua. Coloca el fuego a medio-alto.
Haz un pequeño sachet (leer arriba) que contenga la canela, anís estrellado, clavos de olor y la pimienta negra. Coloca el sachet dentro de la olla.
El tiempo de cocción del pollo varia dependiendo de su tamaño, pero tiene un tiempo aproximado entre 60 y 90 minutos. Cuando el pollo esté listo, sácalo de la olla y separa la carne del hueso. El siguiente paso es opcional, pero es recomendable para desarrollar al máximo los sabores. En un sachet mas grande, coloca los huesos del pollo. Colócalo dentro de la sopa, y déjalos ahí hasta el ultimo momento. Recuerda que en los huesos es donde está concentrado la mayoría del sabor.
Separa el pollo en piezas. Quítales la piel y deséchala. Con las manos, desmenuza las piezas de pollo, hasta obtener pedazos de bocado.
Añade a la sopa la salsa de soya, el fish sauce y la sal.
Prueba y corrige la sal en caso de ser necesario.
Cuando la sopa esté lista, descarta los saches de especias y huesos.
Coloca el pollo de vuelta en la sopa.
Cocina los fideos de arroz en la sopa hasta que estén suaves.
Pica cilantro, menta y chiles picantes y sírvelos en la mesa para que cada quien se sirva según su gusto. Las hierbas siempre se colocan en el ultimo segundo ya que con el calor se marchitan rápidamente.
También coloca en la mesa limones cortados por la mitad e invita a tus invitados a que le pongan limón con alegría sincera, es decir, en abundancia. El toque cítrico le queda divino!